Durante 2020, y a pesar de la pandemia por coronavirus, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) ha continuado autorizando ensayos clínicos de medicamentos, en especial oncológicos.
Según los datos del Registro Español de Estudios Clínicos (REEC), hasta el 15 de septiembre se ha dado luz verde a un total de 698 ensayos, de los cuales cerca del 40 por ciento se enmarcan en el área de oncología y un 20 por ciento son para enfermedades infecciosas –aquí se concentra el impulso a la I+D contra la Covid-19-, seguidos de los ensayos para patologías del sistema nervioso central, cardiovasculares y enfermedades raras o poco frecuentes.
La investigación oncológica es una de las que más ha evolucionado en los últimos años, gracias a un cambio de paradigma con la irrupción de la genómica. Muchos pacientes pueden ya participar en unos nuevos modelos de ensayos clínicos, los llamados umbrella (donde los pacientes con un mismo tipo de cáncer se asignan a diferentes ramas de tratamiento dirigido contra sus mutaciones), basket (en los que participan pacientes con diversos tipos de tumores que comparten una alteración genética) o adaptativos (que ofrecen una posibilidad, planificada previamente, de modificar uno a varios aspectos del ensayo para racionalizar y optimizar el proceso).
“Esto es posible gracias al alto nivel de preparación que tienen los investigadores clínicos en nuestro país, la capacidad de nuestros hospitales y el buen trabajo colaborativo -desde hace años- entre autoridades sanitarias y los promotores de los ensayos, que además ha colocado a España como una de las referencias mundiales en materia de ensayos clínicos”, señala Amelia Martín Uranga, responsable de la Plataforma de Medicamentos Innovadores de Farmaindustria.
En cuanto a supervivencia, en España las cifras son incluso mejores que la media continental, y la supervivencia tras el diagnóstico de un tumor está aumentando de forma progresiva, situándose en el 55,3 por ciento para los hombres y en el 61,7 por ciento para las mujeres, según el último informe de la Red Española de Registros de Cáncer. Especialmente significativos son los avances vividos por la clínica en tumores como los de mama, próstata, tiroides, melanoma o Linfoma de Hodgkin, todos con índices de supervivencia a los 5 años superiores al 80 por ciento.