El peso puede afectar la capacidad de los médicos para interpretar correctamente los análisis de sangre de rutina en niños, según una nueva investigación publicada en el 'Journal of Clinical Endocrinology & Metabolism', la revista de la Sociedad Endocrinológica de Estados Unidos.
Dado que las tasas crecientes de obesidad en niños y adolescentes en muchos países se están convirtiendo en un problema importante de salud pública, es necesario que los pacientes y los médicos comprendan la influencia potencial del peso en los análisis de sangre de rutina.
"Realizamos el primer análisis exhaustivo del efecto de la obesidad en los análisis de sangre de rutina en una gran población comunitaria de niños y descubrimos que casi el 70 por ciento de los análisis de sangre estudiados se vieron afectados", asegura la primera autora del estudio, Victoria Higgins, del Hospital para Niños Enfermos y la Universidad de Toronto en Ontario, Canadá.
"Como las decisiones clínicas a menudo se guían por rangos normativos basados en una gran población sana, es importante comprender cómo y qué análisis de sangre de rutina son afectados por la obesidad para interpretar correctamente los resultados de los análisis de sangre", añade.
Los investigadores estudiaron a más de 1.300 niños y adolescentes sanos de la comunidad en el área metropolitana de Toronto y descubrieron que 24 exámenes de sangre de rutina se ven afectados por la obesidad, incluidas las pruebas de función hepática, marcadores de inflamación, lípidos y hierro.
Si bien se desconoce si este efecto de la obesidad pediátrica refleja la enfermedad temprana, los médicos deben tener en cuenta estos hallazgos al interpretar varios análisis de sangre en niños, señalan los autores.
"Esperamos que los resultados de nuestro estudio ayuden a los pediatras y médicos de familia a evaluar mejor a niños y adolescentes con diferentes grados de sobrepeso u obesidad", concluye Higgins.