Según ha puesto de manifiesto un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Chicago Medicine (Estados Unidos) y que ha sido publicado en 'The Journal of Urology', los hombres que se adhirieron a una dieta restrictiva en grasas tenían una testosterona sérica más baja que los hombres que llevaban una dieta no restrictiva", si bien los expertos han reconocido que no sabe cuál es la mejor dieta para bajos niveles de testosterona.
En el trabajo se han analizado datos de más de 3.100 hombres de un estudio de salud a nivel nacional, de los cuales el 14,6 por ciento cumplían los criterios para una dieta baja en grasas, y el 24,4 por ciento una dieta mediterránea alta en frutas, verduras y granos integrales, pero baja en proteínas animales y productos lácteos.
El nivel promedio de testosterona en suero fue de 435,5 nanogramos por decilitro (ng/dL). La testosterona sérica fue más baja en los hombres con las dos dietas restrictivas: media de 411 ng/dL para aquellos con una dieta baja en grasas y 413 ng/dL para aquellos con una dieta mediterránea.
Las asociaciones se ajustaron para otros factores que pueden afectar a la testosterona, como la edad, el índice de masa corporal, la actividad física y las afecciones médicas. Después del ajuste, la dieta baja en grasas se asoció significativamente con una reducción de la testosterona sérica, aunque la dieta mediterránea no.
Concretamente, el 26,8 por ciento de los hombres tenían niveles de testosterona inferiores a 300 ng/dL. A pesar de la diferencia en los niveles promedio de testosterona, la proporción de hombres con niveles bajos de testosterona fue similar en todos los grupos de dieta.