jueves. 25.04.2024

Patologías y síndromes estivales. Qué no olvidar en el consejo farmacéutico (1)

El verano es una época propicia para cambiar (dentro de lo posible) nuestros hábitos: sol, mejor clima para estar al aire libre, más posibilidad de hacer planes diferentes… las vacaciones, los viajes de verano (en familia, en pareja, con amigos… o solos), la desorganización en los hábitos alimentarios, los excesos festivos… Es una época de disfrute y placer, pero también de búsqueda de nuevas sensaciones y retos. Y como todo cambio en la vida… puede tener sus consecuencias a nivel de salud.

La oficina de farmacia es, en muchos casos, el primer punto de contacto de la persona con el sistema sanitario para intentar solucionar o mitigar en lo posible las consecuencias negativas para nuestro organismo de dichos cambios o situaciones.

Vamos a hacer un repaso de los principales motivos de atención farmacéutica en la farmacia comunitaria en esta época del año:

Diarrea

¿Qué es?

Un aumento en la frecuencia y cantidad de heces debido a infecciones, alimentos en mal estado, enfermedades inflamatorias intestinales, algunos medicamentos, situaciones de estrés, etc.

Recomendaciones

En lo referente a las medidas higiénico-dietéticas, desde la oficina de farmacia haremos hincapié en la rehidratación y la prevención de la deshidratación (recomendaremos siempre tomar un suero de rehidratación oral). Debemos insistir en el hecho de que la costumbre extendida de tomar una bebida destinada a deportistas, en estos casos, no solo no va a mejorar la diarrea, sino que puede incluso empeorarla, debido a que el exceso de azúcar en estas bebidas produce lo que se denomina “diarrea osmótica”, puesto que el exceso de glucosa en el intestino arrastra aún más agua el organismo y, con ello, aumenta el riesgo de deshidratación. En cambio, los sueros de rehidratación de farmacia tienen la cantidad exacta de agua, sodio, potasio y azúcar que el organismo necesita para recuperarse del cuadro diarreico.

Aconsejaremos acompañar dicha toma de suero de rehidratación con una dieta astringente, con una base de hidratos (arroz, puré de patatas y zanahorias, pan blanco tostado), pescado blanco o carne de ave cocidos o a la plancha, huevo pasado por agua, duro o en tortilla; y manzana asada, además de infusiones claras de té o manzanilla.

Debemos aconsejar al paciente que evite en lo posible las grasas, la fibra, el alcohol, el café y los dulces; frutas y verduras crudas; y bebidas refrescantes o muy frías. La leche y los derivados lácteos también deben evitase, tolerándose el yogur natural y los quesos frescos.

Recomendaremos al paciente no tomar alimentos sólidos en las primeras horas. Superada esta primera fase, la dieta deberá ser sólida en pequeñas cantidades y siempre es interesante recomendar una suplementación C con probióticos (probióticos combinados con prebióticos sería la mejor opción para recomendar).

Como recomendaciones generales para el paciente y para todos los convivientes insistiremos en la necesidad de lavarse las manos con frecuencia (especialmente, tras ir al baño y antes de cocinar y comer).

Otra consulta que solemos recibir en la oficina de farmacia es qué recomendaciones seguir para evitar estas diarreas del viajero cuando vamos a viajar a otros países:

•            Recomendaremos beber agua y bebidas embotelladas.
•            Aconsejaremos no tomar bebidas con hielo, helados, alimentos poco cocinados y marisco.
•            Recordaremos la necesidad de pelar la fruta antes de comerla.
•            Beber siempre suero de rehidratación oral de farmacia de forma frecuente y a pequeños sorbos.
•            Y siempre deben asegurarse de estar correctamente hidratados (alcanzando tres litros de líquido diarios).


Estreñimiento

¿Qué es?

La irregularidad en el tránsito intestinal es un incómodo síntoma que puede presentarse durante las vacaciones. Ello suele provocar pesadez de vientre, falta de apetito, dolor de cabeza y cambios de humor acompañados de irritabilidad. 

La causa más común de este síntoma es el cambio de alimentación. La traducción nutricional es una disminución radical del consumo diario de fibra. Normalmente, pasamos de los 25-30 gramos de fibra que se deberían consumir cada día hasta cifras de entre los 5 y 14 gramos. Sobre todo, solemos disminuir la ingesta de la fibra de los vegetales como verduras, frutas y legumbres, que se encargan de prevenir que las heces sean duras y secas, mantengan su fluidez y faciliten su tránsito a través del tubo digestivo.

Por otra parte, aunque en verano se bebe más porque se suda más, normalmente tiramos de bebidas que contienen cafeína en su composición como colas, refrescos energéticos o café, así como las bebidas con alcohol, que no hidratan el organismo, al contrario, tienen un gran poder deshidratante. 

Todo ello, junto con una disminución de la práctica regular de ejercicio físico debido al calor y junto con el hecho de que mucha gente se retraiga de defecar cuando se encuentra fuera de casa, hacen que el estreñimiento en verano sea uno de los motivos de consulta más frecuentes en la oficina de farmacia.

Recomendaciones desde la oficina de farmacia

•            Recomendaremos ingerir 20-30 gramos de fibra al día (fruta, verdura, cereales integrales, legumbres, frutos secos…). Si ello no es posible o va a resultar complicado para el paciente, en la oficina de farmacia disponemos de numerosos complementos ricos en fibra.
•            Aconsejaremos reducir el consumo de dulces, queso, carnes rojas y alcohol.
•            Es importante también recordar que hay que intentar respetar los mismos horarios de comida y beber ente litro y medio y dos litros de agua al día, zumos de frutas o caldos de verduras.
•            Recordar siempre al paciente que es fundamental educar al intestino intentando ir al baño todos los días a la misma hora, durante el tiempo suficiente y adoptando una buena postura (idealmente en posición de cuclillas).
•            Desde la oficina de farmacia podremos recomendar, además del ya mencionado uso de algún suplemento de fibra, el uso suplementos probióticos (si es asociado con prebióticos aún mejor), así como de ciertos preparados laxantes (bisacodilo, lactitol monohidrato, hidróxido de magnesio… así como opciones fitoterápicas como frángula, sen, cáscara sagrada, etc.) si fuera el caso necesario.

Quemadura solar

¿Qué es?

Es el enrojecimiento de la piel que ocurre después de la sobreexposición al sol o a otra luz ultravioleta. Los síntomas pueden incluir piel sensible y caliente al tacto, ampollas, reacciones graves (fiebre, escalofríos, náuseas o erupción cutánea) e, incluso, pelarse la piel en áreas quemadas.

Recomendaciones a realizar desde la oficina de farmacia para prevenir quemaduras solares

•            Recomendaremos usar siempre fotoprotección alta (PFS 50+) aplicándola 30 minutos antes de la exposición solar, incluso en días nublados, y siempre recordando la necesidad de reaplicación cada dos o tres horas y siempre después de cada año o excesiva sudoración.
•            Debemos insistir en que el paciente evite tomar el sol entre las 12 y las 4 de la tarde. Y más aún en zonas de gran altitud o del ecuador.
•            Recomendar usar siempre ropa ligera de colores claros, gorra o sombrero, gafas con protección UV, etc.
•            Es fundamental ayudar siempre desde la oficina de farmacia a elegir el factor de protección adecuado según el fototipo de piel (aunque a priori recomendaremos usar siempre FPS 50+) y la textura que más se adapte a sus necesidades. Insistiremos en que el protector solar debe ser aplicado generosamente en toda la zona expuesta al sol prestando especial atención a la cara, cuello, escote, orejas y empeine de los pies.

Recomendaciones para el tratamiento de las quemaduras solares

En el caso de que el paciente que acuda a la farmacia haya sufrido ya una quemadura solar, le recomendaremos tomar baños o duchas frías con frecuencia para ayudar a aliviar el dolor. Tan pronto como salgan de la bañera o la ducha, deben secarse con palmaditas suaves, pero dejando un poco de agua en la piel. A continuación, recomendaremos aplicar una crema humectante tipo after sun con agentes calmantes y regenerantes como rosa mosqueta, pantenol, centella asiática, etc. para ayudar a calmar la piel quemada por el sol. Recomendaremos no tratar las quemaduras solares con productos con “-caína” (como benzocaína), ya que pueden irritar la piel o provocar una reacción alérgica.

También debemos aconsejar en estas situaciones beber más agua. Una quemadura solar atrae líquido a la superficie de la piel y lo aleja del resto del cuerpo. Beber más agua cuando se está quemado por el sol ayuda a prevenir la deshidratación.

Si se forman ampollas en la piel, el paciente deberá dejar que se curen. La piel con ampollas significa que tenemos una quemadura solar de segundo grado. No deben reventar las ampollas, ya que se forman para ayudar a que su piel sane y protegerlo de infecciones.

Problemas de circulación

¿En qué consisten?

Otro de los problemas habituales del verano son las varices. El calor provoca una vasodilatación en las venas que puede impactar sobre el retorno venoso y dar lugar a uno de los grandes enemigos estéticos del verano: las varices. Pero debemos tener siempre en cuenta que las varices pueden ser signo de un problema de salud mayor y conviene vigilarlas y cuidarlas… y, en caso necesario, acudir siempre a un médico.

Recomendaciones generales a realizar desde la oficina de farmacia

•            Recomendaremos a la persona hacer ejercicio moderado, perder peso, no usar ropa ajustada, levantar las piernas y evitar períodos prolongados de pie o sentado, que le van a ayudar a aliviar el dolor y evitar que las venas varicosas empeoren.
•            Recomendaremos refrescar las piernas (en la oficina de farmacia disponemos de distintos geles de piernas refrescantes que le ayudarán a conseguirlo).
•            Aconsejaremos al paciente masajear las piernas si es posible con una crema venotónica (castaño de indias, árnica, hammamelis…) en el sentido del retorno venoso.
•            En ciertos casos complementaremos esta actuación con el uso de venotónicos vía oral (diosmina, oxerutina, etc.).

Picaduras de insectos

¿En qué consisten?

En verano nos solemos encontrar con estos indeseables e incómodos inquilinos: mosquitos y otros insectos. A pesar de ello, forman parte de los ecosistemas terrestres y son una fuente principal de alimento para una amplia diversidad de animales.

Debemos prestar especial atención cuando viajamos a países donde exista alerta sanitaria por la transmisión de ciertas enfermedades (paludismo, fiebre amarilla…) por mosquitos u otros insectos.

Recomendaciones generales desde la oficina de farmacia para evitar picaduras de insectos

Normalmente, recomendaremos repelentes basados en IR3535 o DEET para reducir el riesgo de picaduras de estos insectos, aunque también existen otros muchos repelentes de insectos eficaces y disponibles en el mercado farmacéutico como icaridin, ftalatos, piretrinas y otros componentes de origen vegetal como extracto de Eucalyptus citriodora, citronela, aceite de soja, etc.

Recomendaciones post-picaduras desde la oficina de farmacia

•            Si el paciente que acude a la farmacia ha sido mordido o picado por un insecto y tiene una sintomatología que consideremos que necesita de atención médica, derivaremos a la misma.
•            En el caso de picaduras de abeja o avispas, recomendaremos quitar el aguijón. Las abejas y las avispas chaqueta amarilla son los únicos insectos que dejan un aguijón en la piel. Hay que raspar el área con una uña o una tarjeta de crédito para quitarla.
•            No pellizcar el aguijón con los dedos ni con pinzas, ya que pueden inyectar más veneno.
•            En el caso de cualquier mordedura o picadura, recomendaremos siempre lavar la zona con agua y jabón suave.
•            A la hora de tratar la picadura, lo primero de todo, hay que quitar cualquier joya apretada del área de la mordedura o picadura, puesto que podría ser difícil sacarla una vez que el área se hinche.
•            Recomendaremos aplicar hielo de manera controlada durante 10 minutos y después retirarlo durante 10 minutos. 
•            Una pomada a base de antihistamínico puede ayudarnos siendo aplicada directamente en el lugar de la picadura. Las lociones de calamina también son otra opción muy recomendada para la actuación desde la oficina de farmacia en el tratamiento de una picadura.

Bibliografía

Diarrea


1. MedlinePlus [Internet]. Bethesda (MD): U.S. National Library of Medicine; c2009. Diarrea; 2020 Jun. 11 [citado 2020 Oct 28]. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/diarrhea.html
2. Faus Dáder, MJ, Gómez Martínez JC, Martínez F et al. Protocolos de Indicación Farmacéutica y Criterios de Derivación al Médico en Síntomas Menores. Granada: Editorial Técnica Avicam; 2018.


Estreñimiento
3. MedlinePlus [Internet]. Bethesda (MD): U.S. National Library of Medicine; c2009. Estreñimiento; 2020 Sep. 14 [citado 2020 Oct 29]. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/constipation.html
4. Faus Dáder, MJ, Gómez Martínez JC, Martínez Martínez F et al. Protocolos de Indicación Farmacéutica y Criterios de Derivación al Médico en Síntomas Menores. Granada: Editorial Técnica Avicam; 2018.


Quemaduras solares
5. MedlinePlus - Información de Salud de la Biblioteca Nacional de Medicina [Internet]. Medlineplus.gov. 2021 [citado 1 febrero 2021]. Disponible en: https://medlineplus.gov/spanish/ency/article/003227.htm
6. Asociación Americana de Dermatología - https://www.aad.org/public/
everyday-care/injured-skin/burns/treat-sunburn


Problemas de circulación
7. Mayo Clinic - https://www.mayoclinic.org/diseases-conditions/varicose-veins/diagnosis-treatment/drc-20350649
Picaduras de insectos
8. WebMD - https://www.webmd.com/first-aid/insect-bites-and-and-stings-children



Eduardo Senante es farmacéutico comunitario y titular de la Farmacia Senante (https://farmaciasenante.com)

Patologías y síndromes estivales. Qué no olvidar en el consejo farmacéutico (1)