El Informe Pharmalive de Alliance Healthcare sobre tendencias en las farmacias españolas señala que, durante el pasado año, la venta de productos en las farmacias españolas para la prevención de la COVID-19 creció un 1250 por ciento en relación con el ejercicio anterior. Se trata de un crecimiento sin precedentes de ninguna otra familia de productos de venta en farmacias.
En términos absolutos, respecto a 2019, las unidades de producto vendidas en 2020 en las farmacias españolas crecieron un 10,2 por ciento mientras que la facturación aumentó un 1,2 por ciento. Ello se debe principalmente porque se han vendido más unidades de productos, pero a precios unitarios inferiores.
Además de mascarillas, guantes, geles hidroalcohólicos y termómetros, la pandemia también ha provocado cambios en la demanda de otros productos de venta en farmacias. En concreto, el contexto pandémico comportó una preocupación mayor de los españoles por reforzar su sistema inmunitario, hecho que se reflejó en un crecimiento de la demanda de vitaminas y suplementos vitamínicos en un 7,1 por ciento en relación con el año anterior. Según el Informe Pharmalive, los antitrombóticos son otra familia de productos cuya demanda también ha crecido un 7,1 por ciento.
Asimismo, la pandemia también ha impactado en el bienestar emocional de la población. El estrés en el trabajo, el temor al contagio o la ansiedad por compaginar vida social y laboral, entre otros factores, han disparado las ventas de psicolépticos, antidepresivos y relajantes en un 4,5 por ciento.
Por el contrario, entre los productos cuya demanda más ha decrecido figuran los relacionados con la gripe y los resfriados, con una caída del 19,2 por ciento, y los dedicados al cuidado personal, como los dermocosméticos, los tratamientos capilares o las cremas solares, con una disminución del 12,8 por ciento.
En términos de prospectiva, el Informe Pharmalive de Alliance Healthcare prevé que, durante el primer trimestre de este 2021, el comportamiento de compra en las farmacias tenga una evolución parecida a la de 2020. Aspectos como la continuidad de las restricciones de movilidad, el distanciamiento social o el fomento del teletrabajo tendrán un impacto en los hábitos de compra en la farmacia.
El farmacéutico, el profesional más accesible
Además de los cambios en los patrones de la demanda de los productos vendidos en farmacias, la pandemia también ha cambiado el rol del propio farmacéutico, situándolo como el profesional sanitario más accesible de buena parte de la ciudadanía. En este sentido, Remedios Parra, Manufacturers and Pharmacies director de Alliance Healthcare, apunta que “durante la declaración del estado de alarma, debido a la capilaridad geográfica de las farmacias, los 55.000 farmacéuticos españoles se convirtieron en el principal punto de acceso de la población al sistema sanitario, facilitando la labor asistencial, especialmente entre los grupos de riesgo”.
Alliance Healthcare ha recopilado estos datos a través de la herramienta Pharmalive, lsolución de business Intelligence de la compañía, que cuenta con un panel de más de 1.000 farmacias, y cuyo objetivo es ayudar a la farmacia a mejorar su gestión mediante la eficiencia en el tratamiento de datos.