sábado. 21.09.2024

El Informe elaborado por Aspime, asesoría especializada en Oficina de Farmacia, y patrocinado por el Club de la Farmacia de Almirall ha sido realizado a partir de los últimos datos del IRPF de 789 Oficinas de Farmacia de toda España, correspondientes al año 2010. Este informe constituye una fiel instantánea del sector y ofrece una amplia perspectiva porque analiza su evolución en términos económico-financieros, fiscales y laborales, sociológicos, entre ostros aspectos.

"La farmacia española está atravesando un período crítico que afecta a su evolución profesional, científica y económica, y necesita tomar decisiones basadas en datos objetivos y comparativos, según su tamaño y tipos de venta" explica Alberto García Romero, Presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid.

El informe revela que después de la aplicación durante algo más de diez años del Real Decreto Ley 5/2000, en 2010 la Oficina de Farmacia española ofrece unas cifras preocupantes en disminución de márgenes netos, y concentra la mayor caída en las grandes farmacias.

Ante esta realidad, Albert Pantaleoni, Gerente del Club de la Farmacia insiste en la importancia de optimizar la gestión de la Oficina de Farmacia: "Cada día entran más de 2 millones de españoles en nuestras boticas, cualquier iniciativa orientada a fidelizar al cliente, ha de contribuir a sacar más potencial a la farmacia. El Club de la Farmacia es consciente de esta oportunidad, y busca formar a sus socios, desde aspectos básicos en comunicación, atención farmacéutica o gestión de campañas sanitarias, hasta técnicas de gestión del tiempo".

Costes laborales

A lo largo de 2011 se han deteriorado todas las estructuras laborales, lo que pone en peligro la subsistencia, tanto de las farmacias pequeñas -en su mayor parte rurales-, como de las grandes farmacias, en las que cualquier desviación sobre sus presupuestos afectan a su estrategia de supervivencia comercial.

Como media, en 2010 las Oficinas de Farmacia españolas han mantenido una plantilla de 3,37 trabajadores. Ha habido un incremento de plantilla si se compara este dato con los de 2009 y 2008, que fueron 3,35 y 3,33 respectivamente. Es más habitual un crecimiento de empleo en Oficinas de Farmacia de mayor facturación, ya que en las de menor facturación la contratación supone un mayor esfuerzo económico. En 2011 se han deteriorado todas las estructuras laborales, poniendo especialmente en peligro la subsistencia de las farmacias rurales y las de pequeño tamaño.

Planificación financiera

La crisis de liquidez de las Administraciones Públicas, las restricciones extremas en los presupuestos públicos, el declive en las ventas y el esfuerzo fiscal desarrollado por el farmacéutico a través de su contribución impositiva, son factores que afectan a la Oficina de Farmacia y la obligan a realizar una rigurosa planificación financiera.  Juan Antonio Sánchez Dantas, Socio Coordinador General de Aspime, destaca que "a pesar de que el farmacéutico lleva conviviendo cuatro años con el «nuevo» IRPF 2007, la fiscalidad de la actividad empresarial de la oficina de farmacia no se ha visto mejorada significativamente con la nueva legislación".

"Hoy más que nunca la oficina de farmacia necesita diseñar y aplicar una correcta planificación financiera, teniendo en cuenta las dificultades de cobro en algunas Comunidades Autónomas y la bajada general de las ventas", indica Alberto García Romero, Presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid. El Informe Aspime incluye por primera vez este apartado.