La Asociación para el Autocuidado de la Salud (anefp) ha celebrado la segunda edición de la jornada Food&Health, a la que han asistido más de setenta profesionales de las compañías asociadas así como expertos en el campo de los complementos alimenticios.
El objetivo del encuentro, inaugurado por el director general de anefp, Jaume Pey, y por el presidente del Comité de Alimentos de la asociación, Eduardo González, era debatir sobre las nuevas tendencias y los retos de este segmento del sector de autocuidado.
Durante su intervención, Emma Schofield, senior analyst de Global Science de Mintel, ha destacado la demanda en nuestros días de complementos alimenticios “holísticos” por parte de los ciudadanos, dirigidos a tratar de forma integral sus necesidades.
Otras tendencias en auge de este sector son, en opinión de Schofield, el desarrollo de complementos alimenticios más personalizados y destinados a la prevención, así como el futuro impulso de nuevos campos que se abren con los estudios de microbioma y que pueden llevar “hacia nuevos productos como los postbióticos”.
Por su parte, Carles Palanca, de ADM Biopolis, se ha referido a la necesidad de seguir investigando en el microbioma humano y, aunque ha admitido que todavía hacen falta muchos estudios, ha asegurado que estamos "en el principio de una nueva era en lo que respecta a la relación entre bacterias y cuerpo humano”.
Fitoterapia
La jornada ha contado también con un análisis del abordaje de la fitoterapia desde la farmacia, incidiendo el profesor de la Facultad de Farmacia de la Universidad de Barcelona, Salvador Cañigueral, en la relevancia que tiene la calidad en estos productos de origen vegetal que se utilizan para complementar la dieta.
En opinión de este experto, los profesionales sanitarios necesitan "buenos productos, que sean adecuados y que se basen en una evidencia científica”, ya que no todos los productos son iguales, "aunque contengan la misma planta" y de ahí la importancia de distinguirlos, tanto por parte de los consumidores como de los profesionales de la salud”.
El proceso de producción de estos productos y su control es lo que va a determinar su calidad y eficacia, ha señaaldo. En esta línea, ha indicado que factores como “unas buenas prácticas en el cultivo y la recolección de la planta, una gestión sólida y transparente en la cadena de suministro o la trazabilidad” contribuyen a asegurar la calidad de este tipo de complementos alimenticios.
Enfoque clínico
Andoni Jáuregui, profesor de Fisiología de la Facultad de Psicología y Educación de la Universidad de Deusto, ha centrado su ponencia en el enfoque clínico que debe haber a la hora de prescribir complementos en las diferentes etapas de la mujer, así como otros condicionantes a tener en cuenta. Ha recordado que los complementos alimenticios ni sustituyen a los medicamentos ni son intercambiables, sino que son complementarios. Sus efectos son más lentos y buscan beneficios más fisiológicos.
Jáuregui considera imprescindible el enfoque clínico en la prescripción y la recomendación de los complementos alimenticios. “A la hora de prescribir es importante identificar bien la raíz del problema del paciente. Para conseguir la estrategia de prescripción tenemos que conocer dónde está el desencadenante”, ha señalado.
Reglamento
Para terminar la jornada, Xavier Gómez, director de la Cátedra de Regulación Alimentaria de la Universidad Católica de Murcia, ha hecho hincapié en las “disparidades” a nivel europeo a la hora de aplicar el reglamento sobre productos alimenticios, y ha apuntado cómo, en caso de duda, "el derecho comunitario siempre prima sobre el ordenamiento nacional” para garantizar la igualdad en la UE. Sin embargo, ha lamentado que algunos países pretenden “sobreproteger al consumidor”, cuando eso no es lo que busca la normativa.
A su juicio, el concepto de comunicación comercial o el de consumidor medio y el uso de famosos en publicidad son algunos de los elementos donde se encuentran más diferencias entre países.
