Por primera vez se han reunido 11 sociedades científicas para elaborar un documento científico sobre el abordaje de los síntomas del tracto urinario inferior (STUI) bajo el título Criterios de derivación y manejo integral de los pacientes con STUI. El documento, coordinado por Grupo SANED y con el apoyo de Astellas Pharma, es el fruto de un trabajo multidisciplinar de equipos pertenecientes a la Sociedad Española de Rehabilitación y Medicina Física, Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria, Sociedad Española de Calidad Asistencial, Asociación Española de Urología, Asociación Española de Enfermería en Urología, Sociedad Española de Geriátrica y Gerontología, Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia, Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria, Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia y Sociedad Iberoamericana de Neurología y Uroginecología.
Manel Santiñà, presidente de la Sociedad Española de Calidad Asistencial, explicó ayer en la rueda de prensa de presentación del proyecto la importancia de los STUI, “ya que es una patología frecuente, infradiagnosticada, puesto que a veces su diagnóstico se demora o no se hace, y que afecta a la calidad de vida de los pacientes”.
Según los datos presentados ayer, los STUI afectan a dos millones de personas en España, donde la hiperplasia benigna de próstata es el más frecuente en hombres y la incontinencia y la vejiga hiperactiva, los más frecuentes en mujeres.
Criterios comunes
Todo esto hace que se generen múltiples visitas a diferentes servicios. Uno de los objetivos del documento es evitar la duplicidad de las consultas. Para José Medina Polo, de la Asociación Española de Urología, “el documento de consenso servirá para saber dónde hay que tratar cada caso con unos criterios comunes y consensuados”, lo que hará que el paciente reciba la asistencia de forma similar en todas las comunidades autónomas.
Porque tal y como se comentó en la presentación, el documento pretende acabar con la variabilidad asistencial existente. Esta se debe, en parte, a un fallo en los protocolos asistenciales, tanto en clínica como en tratamientos. Además, “no se dispone de indicadores de calidad para medir la variabilidad”, detalló Santiñà.
Herramientas disponibles
En esta línea se manifestó Pedro Blasco, de la Sociedad Iberoamericana de Neurología y Uroginecología, al hacer mención a la falta de utilización de las herramientas disponibles, “donde el diario miccional es un claro ejemplo y una herramienta básica para poder hacer el diagnóstico de la incontinencia urinaria”.
Antonio Fernández-Pro, presidente de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia, señaló que la mayor parte de los pacientes con síntomas de tracto urinario se pueden tratar en Primaria. “No podemos saber de qué se habla si no se puede medir, de ahí la importancia de establecer una forma conjunta de actuación”.
Por eso, José Medina Polo, de la Asociación Española de Urología, insistió en la necesidad de adaptar lo que se puede hacer desde el punto de vista sanitario, estableciendo protocolos de actuación con Atención Primaria para que “cada uno sepa lo que se puede hacer en cada ámbito y conocer las debilidades, con el fin de poder mejorar”.
Adherencia terapéutica
Una de estas debilidades es la falta de adherencia terapéutica, común en cualquier patología crónica, y los síntomas de tracto urinario inferior lo son. Tal y como destacó José Medina, “el problema de adherencia es similar en toda patología crónica. Hay datos que sostienen que una mejor relación con el paciente mejora la adherencia, porque en esa mejor relación se puede explicar qué es lo que la persona puede esperar del tratamiento prescrito”.
En la mejora de la adherencia terapéutica, Enfermería y farmacia tienen mucho que decir. De hecho, Manuel Bernal, de la Asociación Española de Enfermería en Urología, hizo hincapié en la necesidad de que el paciente tenga información sobre su proceso. “Si tiene un mayor conocimiento, puede tener un mayor control de sus síntomas”.
En este sentido, Javier Chantada, vocal de la Sociedad Española de Farmacia Hospitalaria, detalló los tres puntos importantes que tiene la farmacia a la hora de incidir en la adherencia. “Tenemos proximidad, flexibilidad y cercanía. Esto hace que ante ciertos síntomas podamos derivar de forma precoz al paciente a su médico de Atención Primaria”, apuntó el experto, quien resaltó la importancia de la receta electrónica a la hora de vigilar la adherencia. “Con la receta electrónica podemos saber si el paciente sigue su dosis y la duración del tratamiento; es decir, si lo sigue bien o si hay infradosificación”.
El documento de consenso nace de la voluntad de los profesionales de trabajar en red para tratar a todos los pacientes con STUI de forma homogénea y coordinada.