Con motivo de la celebración del día Mundial del Virus del Papiloma Humano (VPH), este 4 de marzo, Procare Health, laboratorio farmacéutico especializado en salud de la mujer, busca concienciar en torno a qué es el VPH. La infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH) es una infección que afecta a 8 de cada 10 personas en el mundo pero, a pesar de esta amplia prevalencia, el conocimiento de la población general sobre esta infección es aún reducido.
1. Es una de las infecciones de transmisión sexual (ITS) más comunes entre la población. La infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH) es una de las ITS más frecuentes entre la población. De hecho, se calcula que un 80% de las personas, mujeres y hombres, la ha padecido alguna vez. Sin embargo, se encuentra entre las menos conocidas.
2. Se trata de la principal causa de desarrollo de cáncer de cuello de útero o cérvix. Según datos de la OMS, prácticamente todos los casos de cáncer de cuello de útero, un 99%, están vinculados con la infección por el VPH, que es la infección vírica más común del aparato reproductor. El cáncer de cuello de útero es además el segundo cáncer más frecuente en mujeres de edades entre 15 y 44 años en Europa, según el WHO/ICO Information Centre on HPV and Cervical Cancer. El VPH también puede causar otros tipos de cáncer anogenital, cánceres de la garganta y del cuello y verrugas genitales tanto en hombres como en mujeres.
3. Existen más de 120 tipos de VPH. Hasta la fecha se han descubierto más de 120 tipos virales, pero sólo alrededor de 40 están relacionados con infecciones en el área genital que pueden provocar varios tipos de lesiones, como verrugas en los genitales externos (en hombres y mujeres) o lesiones en el cuello del útero. Estas últimas pueden evolucionar hasta cáncer de cuello de útero. En este sentido, los virus del Papiloma se clasifican por su posibilidad de transformar una célula en cancerígena: existen de alto riesgo – los cuales se encuentran con más frecuencia vinculados al cáncer de cuello de útero; riesgo intermedio y de bajo riesgo, asociados con verrugas genitales
4. Normalmente es una infección asintomática. Existe la creencia de que el síntoma principal del VPH es un picor en la zona genital, pero se trata de una creencia errónea. Esta infección sigue un curso evolutivo, comenzando por ser asintomática, manifestándose solo como hallazgo de técnicas diagnósticas como la citología.
5. No es una cuestión de género. Es cierto que la mayoría de programas de prevención están destinados a las mujeres, esto se debe a que el cáncer de cuello de útero, es el cuarto tipo más frecuente entre las mujeres y tiene una mortalidad muy alta. Sin embargo, los hombres deben concienciarse también sobre tomar precauciones, llevar a cabo una correcta higiene y acudir a un especialista en caso de localizar verrugas o coloración diferente en su pene y/o ano. Al tratarse de una ITS, tanto la mujer como el hombre pueden tener el virus.
6. Cualquier persona sexualmente activa puede contagiarse, no importa el número de parejas sexuales. Aunque es cierto que cuantas más parejas sexuales existan, mayor es la posibilidad de contagio, es erróneo pensar que este virus solo es portado por personas que mantienen relaciones sexuales con diferentes personas. Cualquier persona sexualmente activa, aun teniendo una sola pareja sexual, puede llegar a contagiarse.
7. El preservativo no previene totalmente la infección, aunque minimiza notablemente las posibilidades de contraerlas. El virus no se transmite por fluidos, sino por microlesiones. Esto hace que el empleo del preservativo masculino reduzca las posibilidades de transmisión, pero no las elimine totalmente, ya que no cubre todas las áreas corporales que pueden estar infectadas. Aun así la reducción de las posibilidades de infección por VPH se ha observado tanto en hombres como en mujeres, por esa razón es muy importante utilizar de forma correcta el preservativo en cada acto sexual.
8. La importancia de la prevención de la infección, existen vacunas eficaces y seguras. Una de las vías fundamentales de prevención del virus es la vacunación, gracias a la cual, en algunas décadas, se minimizará notablemente la posibilidad de infección y por tanto de casos de cáncer de cérvix. En el caso de España, la vacuna para el VPH está incluida en las cartillas de vacunación de las niñas desde el año 2008.
9. El VPH se trata. Si bien es cierto que existe la vacuna para la prevención de la infección, no existen terapias no invasivas contra las lesiones y hasta ahora el ámbito de acción ante un caso positivo era el control ginecológico. Eso ha cambiado gracias al primer tratamiento que previene y trata las lesiones de bajo grado causadas por el VPH. Se trata del gel vaginal PAPILOCARE, que ha demostrado reparar las lesiones provocadas por el VPH a los seis meses en un 88 por ciento de los casos y conseguir un aclaramiento (desaparición del virus) en un 63 por ciento. Así se ha recogido en el Ensayo Clínico Paloma, que ha contado con la participación de alrededor de 100 pacientes. “Se trata del primer tratamiento no invasivo respaldado científicamente que consigue reparar las lesiones de bajo grado e incluso eliminar por completo el virus de alto riesgo, todo un avance a nivel internacional” explica Carine Emsellem, directora Científica de Procare Health. “Además, recientemente hemos ido un paso más allá con el anuncio de colaboración estratégica, junto a BioVaxys Technology Corp, para el codesarrollo y comercialización de vacunas terapéuticas contra cánceres ginecológicos de ovarios y cérvix.”