jueves. 19.12.2024

Los farmacéuticos madrileños han lanzado un SOS a las administraciones y han pedido el envío urgente de mascarillas, entre otro material de seguridad, para mantener las puertas abiertas a la población. El presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM), Luis González Díez, tal y como viene haciendo en distintos medios de comunicación, además de trasladarle periódicamente su súplica a las autoridades sanitarias, quiere hacer una vez más “un llamamiento a las administraciones y a las autoridades sanitarias para que no se olviden de los farmacéuticos de oficina de farmacia, el sanitario al que el enfermo acude en primer lugar, y distribuyan con urgencia material de protección, como mascarillas, guantes, gafas… si quieren seguir contando con los farmacéuticos en la primera línea de la atención ciudadana”.

Según ha manifestado, “a día de hoy, y gracias a las medidas que los farmacéuticos estamos tomando a título individual, sin ningún tipo de ayuda, desgraciadamente tenemos el conocimiento de que cuatro oficinas de farmacia de la red de 2.882 establecimientos abiertos en la Comunidad de Madrid han comunicado su cierre temporal como consecuencia del coronavirus. En cualquier caso, el resto de farmacias continúa garantizando un servicio que se ha convertido en esencial para la población en todos los barrios de las ciudades y municipios de la región, incluyendo los servicios de guardias. Las bajas laborales que se están produciendo en las oficinas de farmacia se han podido cubrir de momento y, aunque el Colegio ha activado su Bolsa de Empleo para suplir las necesidades de personal en el futuro, es el momento de garantizar las mínimas medidas de seguridad para proteger a los farmacéuticos como profesionales de riesgo y evitar así también el contagio de sus familiares”, señala Luis González.

Y añade: “Conviene no olvidar que el contagio de un farmacéutico puede implicar el cierre de la farmacia y, en consecuencia, la pérdida de un punto de referencia sanitario para los ciudadanos de la zona tanto rural como urbana. Los farmacéuticos madrileños están dando muestras una vez más de su profesionalidad y compromiso ante una situación de emergencia sanitaria sin precedentes, que exige la adopción urgente de medidas por parte de las autoridades sanitarias para garantizar la continuidad de la prestación farmacéutica a todos los madrileños”.

Nadie a salvo

El COFM quiere enviar su más sentido pésame al primer farmacéutico italiano que ha fallecido como consecuencia del COVID-19, y también para enviar un mensaje de responsabilidad y “pedir a la población que no acuda a las oficinas de farmacia para aprovisionarse de medicamentos porque no hay desabastecimiento de fármacos. La continuidad de los tratamientos está garantizada”. Y concluye González: “Por favor, con carácter urgencia, mándenos el material de protección necesario para seguir atendiendo a la población”.

Por su parte, una farmacéutica madrileña que describe la cruda realidad de muchos farmacéuticos, que están atendiendo las necesidades de muchos ciudadanos en total desamparo y poniendo en riesgo su propia salud, se queja: “Estamos desprotegidos. Atendemos directamente a muchos pacientes con síntomas de fiebre sin mascarilla y sin ninguna protección, tan solo confiando en que respeten la línea de seguridad que hemos marcado en la farmacia”.