sábado. 21.09.2024

El Observatorio del Medicamento de  la Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles (FEFE) ha hecho público su informe de febrero de 2019  en el que se analizan las causas del actual desabastecimiento de fármacos. Tal y como se expone en este documento, se ha entrado en una fase en la que el desabastecimiento ha pasado a ser un problema estructural, cuyas causas no son solo las que señala la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), sino otras más profundas que tienen que ver con la intervención de precios, el volumen total del stock de reserva del mercado y otras cuestiones atribuibles directamente a la política de precios de la Administración.

Cabe recordar que a la vista de las diferencias observadas entre el desabastecimiento declarado, y el real que se da en las farmacias, el Consejo General de Farmacéuticos desarrolló la aplicación CISMED que elabora informes con carácter semanal. De esta forma, el informe señala que solo el 31,8 por ciento de los medicamentos desabastecidos habían sido notificados a la AEMPS, lo que demuestra que existe otro tipo de desabastecimiento, que tiene que ver con el canal de distribución y las existencias de las farmacias.

Pese a todo ello, la propia AEMPS reconoce en su último informe que el desabastecimiento es un fenómeno creciente desde el punto de vista de las notificaciones recibidas de la industria farmacéutica y que a lo largo del año 2018 se han recibido un total de 1.332 notificaciones de problemas de suministro, lo cual supone un 44 por ciento más con respecto a 2017. Además en el segundo semestre de 2018, las notificaciones recibidas se han incrementado de forma sustancial.

Posibles soluciones

Ante estas cifras, el Observatorio del Medicamento  propone una serie de soluciones relacionadas con el sistema de precios de referencia, la vuelta a que el precio de los medicamentos aparezca en el envase y a la puesta en marcha del sistema de precios notificados.

En concreto, se propone implementar con urgencia el sistema de Precios Notificados, justificando que  si los medicamentos tuvieran un doble precio, el farmacéutico aceptaría un sobre stock, sabiendo que si se producen bajadas de precios financiados, siempre quedarían los precios notificados para las prescripciones privadas, que podrían compensar las pérdidas.

Por otra parte, defienden volver a incluir el precio en el envase: defendiendo que tendría un efecto muy positivo sobre las prescripciones al Sistema Nacional de Salud, donde sus usuarios podrían comprobar que se les aplica un precio menor. Por último, se insiste en derogar los Decretos Ley,  que imponen deducciones y descuentos al Sistema Nacional de Salud, o en todo caso, constituir con las cantidades recaudadas un fondo que revierta en el sector.