lunes. 20.05.2024

La hipoglucemia consiste en un descenso de la glucosa en la sangre. Se presenta cuando los niveles caen por debajo de 70 mg/dl y se acompaña de síntomas, como mareo, malestar general, temblor en el cuerpo y sudoración fría, que revierten con la toma de azúcares. Se puede presentar en cualquier persona, pero es más frecuente en diabéticos.

Está la hipoglucemia moderada, que se la puede tratar el propio diabético. En este caso el organismo reacciona produciendo síntomas que permiten tomar las decisiones adecuadas. En la hipoglucemia inadvertida se producen síntomas neuroglucopénicos sin que haya habido síntomas adrenérgicos de advertencia. Si un diabético tiene muchas hipoglucemias las hormonas contrarreguladoras se secretarán cada vez a unos niveles más bajos de glucemia, lo que conllevará a que se tengan síntomas de déficit de glucosa en el cerebro sin haber notado síntomas de advertencia.

Por su parte, en la hipoglucemia grave los síntomas son tan severos que imposibilitan a la persona para reaccionar. Se precisa una segunda persona para ayudar a remontar la hipoglucemia administrando glucosa oral o glucagón. Se puede producir pérdida de conciencia y convulsiones. Para terminar, la hipoglucemia retrasada es un término que se utiliza para definir aquellas hipoglucemias que se producen entre 4 y 24 horas después de haber hecho ejercicio físico. Esto se debe a que durante el ejercicio se ha utilizado la reserva de glucógeno del hígado y tiende a rellenarse después del ejercicio lo que podría causar una hipoglucemia.

Insulinodependientes

Los pacientes que más hipoglucemias sufren son los lo insulinodependientes. En el grupo de diabéticos 2, hay que destacar los que precisan también del uso de insulina o que mantienen tratamiento con sulfonilureas frente al uso de los nuevos antidiabéticos orales, tales como los iDPP4 o los glucusúricos. Los casos más habituales son los ancianos crónicos frágiles que toman sulfonilureas, con el consiguiente riesgo de caída seguida a la pérdida de conciencia por hipoglucemia, llegando incluso a coma hipoglucémico en el peor de los escenarios.

En relación a los DM tipo 1, se ven pacientes de dos tipos; por un lado, los cumplidores con un control riguroso de la administración de insulina y de la alimentación, y, por otro lado, los pacientes con escasa o nula conciencia de enfermedad, que creen que no sufrirán complicaciones. Por tanto, es importante para la detección precoz que conozcan la sintomatología asociada a la hipoglucemia.

Primeras pautas

Lo primero que recomiendan los especialistas a los diabéticos es dieta y ejercicio, si no se consiguen objetivos, se inicia el tratamiento farmacológico con una intervención escalonada. La metformina es el tratamiento inicial de elección en todos los pacientes salvo intolerancia o contraindicación, puesto que no produce hipoglucemias. Si no se consigue el control, se asocian inhibidores de la DPP4. Por lo general, en este tipo de pacientes, si no son muy obesos y siguen una buena dieta, hay un buen control y la incidencia de hipoglucemias es muy baja.

El mejor tratamiento de la hipoglucemia es su prevención. Por eso, hay que educar y concienciar bien a los pacientes diabéticos, sobre todo a los que tienen DM2, que son los menos conscientes de las consecuencias de una hipoglucemia y sus riesgos. Hay que insistir en que no deben omitir ninguna toma de alimento, que si van a realizar ejercicio físico intenso deberán aumentar la ingesta de alimentos o disminuir la dosis de insulina, y en el caso de los pacientes insulinodependientes, deben seguir una técnica correcta de inyección y dosificación de la insulina. Por eso, la educación diabetológica es fundamental.

Para la elaboración de este artículo se ha contado con la colaboración de los doctores especialistas en Endocrinología Víctor Puigdevall Gallego, en Medicina Interna José Luis Delgado Morales, y los médicos de Familia Laura Izquierdo Guadilla, Patricia Menéndez Rodríguez y Javier Carrillo Santos, de Burgos, y Susana Sánchez Ortega, Begoña Goiria Vicandi, Elena Millan Eguskiza y Carlos Zubiria Sopena, de Bilbao.