sábado. 21.09.2024

Según los datos disponibles, el 53% de la población española busca temas de salud por Internet. Cada año los médicos notan que el número de pacientes que se acercan a la consulta habiendo consultado previamente Internet es mayor. El acceso a una información rápida y de forma tan fácil hace que la gran mayoría de los pacientes consulten en Internet como tratar correctamente ciertas patologías y sintomatología de ciertas enfermedades. Es bueno que el paciente se interese por su enfermedad, pero hay que tener en cuenta que Internet es un amplio territorio en el que la mayoría de los pacientes no saben buscar correctamente y cuando lo hacen, la falta de conocimientos médicos no les hace entender correctamente lo que han leído. En muchos casos estas búsquedas conducen a confusión y alarma innecesarias. Hay que estar alerta ante los pacientes desconfiados de la pauta y tratamientos, de los que se informan de todas las contraindicaciones y abandonan el tratamiento sin comentárselo a su médico, a los que hay que añadir los mal informados, que enlentecen las consultas y ponen inmensos inconvenientes y objeciones.

En esta situación, hay que tener en cuenta que muchos los pacientes acuden a la consulta con una idea previa acerca de los problemas, mezcla de su cultura general y de los hallazgos en la red. Es frecuente la consulta en el ordenador y la posterior consulta al profesional, aunque sólo se manifieste el primer aspecto ante problemas de cierto relieve, que preocupan al paciente. El perfil más habitual es un paciente joven o de mediana edad, entre 16 y 49 años, con nivel cultural y económico medio o medio-alto, sin predominio por sexo o ligera prevalencia del sexo femenino.

Temas más buscados

Los temas que más interesan son muy variados, desde enfermedades crónicas como diabetes, HTA, dislipemia, alergias, embarazo y todo lo que conlleva, pasando por vacunaciones, procesos dolorosos como cefaleas o de origen musculoesquelético y la nutrición y las dietas. Pero Internet no va a reemplazar al médico, o por el contrario hace que aumente la participación con el paciente mejorando así la relación médico-paciente. Aquí es clave tener contacto visual con el paciente para poder hacer una buena anamnesis y exploración física y, por tanto, siempre será necesario nunca siendo sustituida por Internet. Es imposible filtrar toda la información que aparece en Internet sin unos conocimientos médicos previos y tampoco se puede diagnosticar a un paciente por lo que se lea en alguna página de Internet. El uso de Internet es positivo en cuanto a que ayuda a entender mejor su patología al paciente y a concienciarse de cómo tiene que seguir un tratamiento y un cambio en su estilo de vida, mas allá de la medicación.

En este contexto, hay una preocupación con el aumento de los casos de pacientes que rebaten nuestros diagnósticos basándose en que han leído algo en alguna página de Internet, así como los que se automedican siguiendo estas mismas pautas, lo cual es muy peligroso y se da cada vez con más frecuencia.

Calidad de información

Según un estudio que se llevó a cabo en el Complejo Hospitalario Universitario de Santiago y que se publicó en PlosOne sobre la calidad de la información online usando como indicador el tema de la vacuna del papiloma humano, el 45% de las páginas con información sobre el tema no cumplían una serie de criterios establecidos siguiendo los criterios de las publicaciones en revistas médicas en cuanto a calidad y credibilidad. A título de ejemplo solo un 35% citaban las fuentes de la información recogida.

Por eso, a la hora de recomendar alguna página web hay que ser cautos. Hace unos años, en 1999, el Colegio de Médicos de Barcelona puso en marca la Web Médica Acreditada (WMA), programa calidad y de certificación de webs de contenido sanitario en España y Latinoamérica. En este proyecto hay un índice de webs que han obtenido el sello de calidad y se ha diseñado el buscador WMA-Google que permite realizar búsquedas únicamente entre las webs acreditadas y un conjunto de webs de instituciones sanitarias de referencia, como el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad y la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Buen uso

Así, en líneas generales, si el uso es bueno y la información es la correcta que los pacientes busquen información en Internet antes de acudir a la consulta no mediatiza a la hora de atender al paciente, en estos casos el uso de Internet es muy positivo haciendo que el paciente esté más informado para aclarar sus dudas y así ahorrar tiempo y consultas innecesarias. Por el contrario, si se hace mal uso de Internet puede conllevar desinformación y generar muchas dudas y sobretodo hacer que empeore la clínica y la preocupación del paciente. En estos casos, dicha situación puede llegar a exacerbar las patologías, poniendo siempre al paciente en la situación más grave con el riesgo de provocar esto gran alarma sanitaria en la población.

Algunos especialistas han destacado que, según su experiencia, las mujeres utilizan más esta herramienta que los hombres. Esto hace que, por ejemplo, entiendan mejor el vocabulario que empleamos. Disponer de esa información, ayuda a muchos pacientes a mejorar sus hábitos de vida saludable y a tener una mejor terapéutica y a que se centre en el autocuidado como una de las estrategias más importantes del manejo de la información buscada en Internet.

Para la elaboración de este artículo se ha contado con la colaboración de los doctores especialistas en Medicina de Familia Juana María Delgado Lorente, Alberto Acosta Prados, Manuel García Sala, Joaquín Ferrándiz Miquel, Ernesto Ferras Sardiñas y Alicia Raduan Paya, del Centro de Salud La Fábrica, de Alcoy; Pedro Manuel Román Morata, María Concepción Melgarejo Moreno, Marcelino Meca Solana, Julio Yelo García, Ascensión García Illan y María Cruz Villalba García, del Hospital de la Vega Lorenzo Guirao; Janet Kopke Martín, Manuel Molero Torres, Cayetano Alarcón Giménez, José Antonio Fernández Navarro, Edgar A. Catena Carroz, del Centro de Salud de la Florida, Alicante; los médicos de Atención Primaria Genaro Ortiz  Jover, Javier Prados del Pino, Juan  Pérez Verdú, Miguel Ángel Juárez Cerdá, Enrique Martínez Arnau, de Alicante; Herminia Marín Cervantes, Carlos López Contreras, Juan Albaladejo Lloret, Juan de Dios Arnaldos Herrero y Pedro José Martínez Serrano, del Centro de Salud Espinardo; María Dolores Marcos Rodríguez, Susana Bercial Climent, María Remedios López López, Ginamarys Carmen Núñez Almonte; Vanessa Martínez Avilés, del Centro de Salud Orihuela Costa, Alicante, y Génesis Pérez Alcántara, Rául Oscar Seoane Sánchez, Claudia Rodríguez Caicero, Octavio Sosa Mesa, Vicente Illobell Bertomeu, José Alfredo Agullo López, en Alicante.